UN CAMBIO, NI MODO


Me quedo muy impresionado de los silencios, de los quiebres que se dan en este ir y venir de las palabras y las cosas, como Foucault. Me hubiera gustado que todos pusieran sus Blogs, que discutiéramos los planes de trabajo, pero no ha sido posible. Seguramente será para otro tiempo.
Sé que en la Facultad el ambiente se ha ido haciendo pesado, denso, pero qué le vamos a hacer. La Dirección de la Facultad es un puesto extremadamente duro, pero que, al menos, hay cinco personas que quieren ser distinguidos por la comunidad, por el Rector y por la Junta de Gobierno para ese cargo que dura cuatro años. Tenemos el ejemplo de insignes maestros que han dirigido los destinos de la Facultad, no como iluminados, no, sólo como personas que son capaces de coordinar proyectos, dirigir esfuerzos para que éstos no estén atomizados sino que tengan destinos comunes; directores que han sabido dar un espacio a la academia, sin duda, lo más importante. Somos una Facultad, donde lo más importante es la docencia, y esto creo, es lo que ha ido perdiéndose por el hecho de que estamos sometidos a una suerte de "productividad" que en humanidades es difícil de medir. ¿Cómo medir el estudio del Quijote, por ejemplo? Hay un gran maestro de la Facultad que ha dedicado toda su vida a ello, ¿por esto mismo no podría estar en los puntos? ¿Cómo medir la pasión por Proust o por Joyce? ¿Cómo evaluar la revolución que representó en el estudio de la historia Hayden White? ¿Cómo estudiar en dos semestres la Fenomenología del Espíritu de Hegel? ¿Y el conocimiento de la Geografía, de sus aportes a nuestra realidad como el observatorio meterológico del Colegio de Geografía? o los estudios metodológicos que se hacen en el Colegio de Pedagogía?
No, pareciera que no hay lugar para todos estos estudios si no se someten a un difícil e intemperante hoyo negro llamado puntaje, efectividad, productividad. Sí, productividad sí, claro pero con criterios distintos a las ciencias, con bases diferentes a el conocimiento positivo. Nadie se niega a ser evaluado pero con criterios que no permitan la discrecionalidad.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece más que nada una falta de cordialidad con los alumnos que no les haya interesado en lo absoluto hacer pública su propuesta, sobre todo a sabiendas de que Usted está poniendo todo en un blog. Bueno, el silencio también es una respuesta. A lo mejor no tienen los medios para hacerlo y si es así qué lástima, y si no es así también.

Daniel G.G. dijo...

Un priista y un católico, diría yo. Y conste que soy lo segundo...

No creo que uno u otro de esos modos sean intrínsecamente malos, pero sí que cada uno debe ser aplicado en su lugar y contexto: el cónclave de máxima secrecía no puede venir bien para elegir un director cuando lo que está en juego es el uso y destino de recursos públicos. La rendición de cuentas, lo has dicho bien, debería ser virtud del ejercicio universitario, desde los proyectos de investigación hasta la designación de "cabezas" que van a dar las pautas para ejercer el presupuesto.
Me parece muy necesario fortalecer una cultura de vigilancia y un "principio de publicidad": no andan tan bien las cosas humanas como para pensar que vicios privados redundan en virtudes públicas sino más bien lo contrario...

Qué buenos tiempos los de la moral de la vergüenza y la pública reconvención: Sólo esto garantizaba una función verdaderamente pública y una responsabiidad civil.

Hasta pronto

Alfredo R. I. dijo...

¿Transparencia dice usted, mi estimado? ¿Transparencia en la universidad, en sus órganos y dependencias? Lo dejo como simple pregunta, seguida del consabido ¿existe eso? ¿No es acaso lamentable?

Un abrazo, nos vemos en las presentaciones.

Anónimo dijo...

¡Saludos, Alberto!

Como te lo dije hoy al encontrarte en la facultad, te deseo toda la fortuna y éxito en estas elecciones.

Voy a votar por ti, pues te conozco, conozco tu trayectoria y conozco tu capacidad. Así, pues, eres digno de tan honroso cargo.

Un abrazo,
Lutz.

Daniel G.G. dijo...

Mmmm... por qué se fue lo del PRI? Está de moda! hombre, todos entendimos que lo decías en el sentido de "ser un medieval", como esa simplificación autorizada por el uso. Deberías ponerlo de nuevo para que nuestros comentarios tengan sentido.. Nos vemos mañanita